La Razón

Buenos Aires anunció el lunes que no otorgará permisos para la realización de fiestas masivas de música electrónica tras la muerte de cinco jóvenes por consumo de drogas sintéticas durante un evento de estas características el pasado 15 de abril.

 

 

El alcalde de la capital, Horacio Rodríguez Larreta, explicó durante un acto oficial que la medida regirá hasta que la legislatura de la ciudad apruebe un proyecto de ley para “la prevención y concientización sobre los efectos de las drogas durante los eventos, con una mayor visibilidad y señalización de dónde están los lugares de atención de la salud, para que la gente lo sepa rápidamente”.

Cinco jóvenes murieron y otros cuatro permanecen internados con pronóstico reservado por el consumo estupefacientes durante la edición local de la fiesta Time Warp, un festival de música electrónica que surgió en Alemania hace 22 años y luego se extendió a otros países.

Testigos declararon en la justicia que durante la fiesta realizada en el complejo Costa Salguero, utilizado habitualmente para convenciones y eventos multitudinarios, se comercializaron estupefacientes dentro del lugar.

Los asistentes relataron que “en varias ocasiones durante la noche, les ofrecían ketamina, cocaína, LSD, popper, y pastillas de éxtasis y que no observaron que el personal de seguridad ni policial hiciera algo para impedirlo”, según consta en el informe del fiscal federal Federico Delgado.

La alcaldía de Buenos Aires, que tiene bajo su responsabilidad la habilitación y control de estos establecimientos y de los eventos que allí se realizan; miembros de fuerzas de seguridad federal y los organizadores de la Time Warp son objeto de investigación judicial también por otras graves irregularidades, como que el número de asistentes fue el doble de la permitida, falta de control en el ingreso, y una enorme cantidad de botellas de agua minera y el cierre en el sistema de agua corriente en los baños.

Cinco personas fueron detenidas por este caso, entre ellos uno de los socios de la empresa organizadora de la Time Warp. También el jefe de evacuación del evento y tres jóvenes que habrían traficado droga durante la fiesta.