El Presidente colombiano anunció hoy que donará el dinero que recibió por el Premio Nobel de la Paz a las víctimas del conflicto armado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el país.

“Este gran premio Nobel, que algunos lo consideran el más importante de todo el planeta, viene acompañado de un premio también monetario, 8 millones de coronas suecas (alrededor de 18 millones de pesos mexicanos)”, declaró Juan Manuel Santos.

“Hemos tomado la decisión de donar esas 8 millones de coronas suecas para que las víctimas puedan ser reparadas”.

Santos realizó este anuncio en Bojayá, Chocó, donde se reunió con las víctimas de la violencia, según informó en un comunicado la oficina del Mandatario. El País informó que el municipio sufrió un ataque de las FARC en 2002.

“Vamos a decidir obras o fundaciones, o programas que tengan que ver con víctimas y reconciliación”, explicó el Presidente colombiano.

Además, informó El País, el jefe de Estado agregó que es el mandato de todo el mundo que en Colombia se continúe con la búsqueda por encontrar y consolidar la paz.

Esta noticia se da a una semana de que en Colombia la mayoría de los votantes del plebiscito votaran en contra de ratificar el acuerdo de paz entre el Gobierno de Santos y las FARC.

El 50.2 por ciento de los que votaron dijeron “no”, mientras que el 49.7 por ciento dijo que “sí”.
Delinea Uribe puntos para paz

Por otro lado, el ex Presidente colombiano, Álvaro Uribe, quien encabezó el movimiento en contra del pacto del Gobierno con las FARC, presentó hoy cinco requisitos que Santos y las FARC deberán considerar para acordar la paz en Colombia.

“Se debe privilegiar la erradicación manual de drogas ilícitas, sin que el Gobierno pierda la facultad de fumigar cuando lo estime conveniente, siempre con el cuidado de no hacer daño al ser humano, a los animales ni a otros recursos naturales”, lee el documento presentado hoy por Uribe en Twitter.

El segundo punto del documento “Votamos No, seguimos por la paz. Urgencia y Paciencia. Algunas proposiciones” pide que en los acuerdos no se afecte a los propietarios o poseedores de tierras.

“El apoyo al campesino no implica desconocer la necesidad de la empresa agropecuaria transparente”, concluye el punto dos.

Los siguientes requisitos en el documento se centran en las obligaciones de las FARC, quienes deberán de cumplir con estas dentro de las posibilidades fiscales y financieras del país, así como no limitar la descentralización ni las obligaciones de los funcionarios colombianos.

“Las consultas a comunidades podrán ser limitadas en el tiempo por decretos reglamentarios del Gobierno, a fin de que no entorpezcan el desarrollo equilibrado de la Nación”, señala el quinto y último requisito del texto.

El documento, previo a la puntualización, insiste en que los responsables de delitos de entre los guerrilleros cumplan con condenas de entre 5 y 8 años, pero que sean en lugares como granjas agrícolas.

También señala que a aquellos soldados de rangos bajos podrían recibir amnistía siempre y cuando no hayan cometido actos de lesa humanidad.

 

Reforma