Cd. de México.- El Cardenal Norberto Rivera y feligreses oraron este domingo por migrantes mexicanos y por el Presidente electo de Estados Unidos, el magnate republicano Donald Trump.
En la homilía, Rivera expuso que el desempleo es un fantasma que nos aterroriza en cada crisis económica.
“Por los acontecimientos recientes nosotros sentimos que muchos tienen un terrible miedo que su trabajo se termine, de no encontrar trabajo. Muchos jóvenes viven con ese miedo”, apuntó.
El prelado aseguró que el desempleo es capaz de generar traumas morales y sociológicos.
“La falta de trabajo, la desocupación, que considero es un fantasma que nos aterroriza en cada crisis económica y nos aterroriza porque hace imposible sacar adelante a la familia, crea traumas morales y sociólogos.
“El desocupado se siente inútil, pierde el estima de sí mismo y la de sus familiares, que quizá lo juzgan incapaz y falto de iniciativa”, apuntó en la homilía.
En consecuencia, Norberto Rivera pidió mostrarnos agradecidos con los empresarios que crean buenos empleos.
Ve Arquidiócesis incertidumbre económica
La Arquidiócesis de México afirmó que hay incertidumbre en el futuro económico de México tras el triunfo electoral de Donald Trump.
En la editorial del semanario Desde la Fe criticaron que el Banco de México y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) hablen de una “presunta” estabilidad macroeconómica.
“La realidad nos asesta el duro golpe del trago amargo para darnos cuenta de lo profundamente dependientes que somos de Estados Unidos”, se expuso en la publicación.
En las primeras horas del triunfo de Trump, añade, existió preocupación por la depreciación del peso, el futuro de millones de migrantes y la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC).
La Arquidiócesis consideró que son irrealizables iniciativas del republicano, como la deportación de migrantes indocumentados y la construcción del muro fronterizo.
En el documento se llamó a que México muestre su capacidad e inteligencia, en lugar de unirse al pesimismo.
Además, se reprochó que durante la campaña presidencial en Estados Unidos las autoridades diplomáticas mexicanas fueran pasivas ante las declaraciones racistas del magnate.
“La visita de Trump en septiembre pasado tuvo consecuencias negativas. Sin embargo, el Gobierno de México le debe dar vuelta a esos vergonzosos episodios y serenarse para iniciar, ahora sí, una política exterior sería”, apuntó la Arquidiócesis.
En el escrito se consideró que Trump no es un hombre político, sino que usó el miedo y el enojo de los estadounidenses para granjearse éxito electoral.
Reforma / Arcelia Maya