Como Presidente de Estados Unidos, Donald Trump tiene la capacidad de retirarse de acuerdos comerciales, como el TLCAN, e imponer aranceles a productos específicos. 

 

México, México.- La inversión extranjera que llega a México podría frenarse si se concretan las promesas comerciales de Donald Trump, Presidente electo de Estados Unidos.

“Para México, lo más probable es que cualquier inversión planeada previamente estará en pausa por algunos meses hasta que se determine cuáles serán las nuevas reglas, la nueva realidad”, explicó Doug Smith, consultor de negocios senior del Centro de Comercio Internacional de la Universidad de Texas en San Antonio.

Para la economía del País, tan sólo la Inversión Extranjera Directa proveniente de Estados Unidos representa 35 por ciento del total este 2016.

Como Presidente de Estados Unidos, Trump tiene la capacidad de retirarse de acuerdos comerciales, como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), e imponer aranceles, aunque sean temporales, a productos específicos.

El Instituto Peterson de Economía Internacional (PIIE, por sus siglas en inglés) documenta que específicamente hay tres medidas diferentes que se podrían adoptar para ejercer presión sin necesidad de que el Congreso apruebe su uso.

“Mucho de lo que habrá de venir dependerá de a quién nombrará como asesor, y de si ellos serán cautos y tienen una visión más amplia o si serán más agresivos, además que no sabemos qué tan dispuesto estará a escucharlos”, puntualizó Smith.

Detener las importaciones tendrá un efecto del cual se está hablando poco: aranceles adicionales tendrían un efecto de encarecimiento en los productos vendidos en Estados Unidos, lo cual dañaría al consumidor y esto podría generar un punto de presión.

Entre México y China, otro país que está amenazado para que se le impongan aranceles, surten una tercera parte de lo que el país del norte importa, castigar los productos de estos países generaría un gran hueco en el abastecimiento de bienes de consumo.

A través de una carta, José María Zas, presidente de American Chamber of Commerce of México, describió la relación actual que hay entre ambas naciones y el impacto que tendrían si se dieran cambios arancelarios.

“Las plantas que operan en México, casi todas ellas utilizan componentes de Estados Unidos. Al inverso también es cierto. Todas las plantas de Estados Unidos del sector electrónico, automóviles, aviación, químicos y muchos otros utilizan partes mexicanas”, describió.

Explicó también que la imposición de aranceles implicaría que las plantas a los dos lados de la frontera perderían competitividad y que los distintos productos que se exportan actualmente aumenten de precio.

Mencionó que el intercambio comercial anual entre México y Estados Unidos es de 496 mil millones de dólares, es decir mil 400 millones de dólares diarios, y que 6 millones de estadounidenses tiene un trabajo o dependen del intercambio comercial entre ambos países.

Reforma / Ulises Díaz