Conociendo la gama de marrullerías en el menú de trapacerías del cartel 22, por un lado. Y por el otro, el colmillo retorcido de los asesores de Alejandro Murat, tengo la certitud de que los amagos del aborregado magisterio para el próximo uno de diciembre se reducen a dos signos:
1.- Que el PRI ya negoció con los mañosos capos que son los que controlan los hilos de la gran industria del chantaje político. Son los que se entienden bien con el sistema. Saben hasta donde es posible restirar la liga. Ahora que si realmente quieren jugar al mártir -me dice un experimentado policía- ya estamos viendo las primeras advertencias. Varias ejecuciones el mismo día. En Tuxtepec y en Juxtlahuaca. La semana pasada, en otra purga similar, murió otro líder del MULT. Obvio, puede ser también resultado del reparto inequitativo del botín entre los capos.
2.- Del lado de los “tontos útiles” que maneja el cartel 22, están los ingenuos. Los que creen que realmente están haciendo “revolución”. Están esos rostros juveniles sedientos de violencia muy convencidos de su derecho a ser “maestros” sin estudiar. Allí andan también los muchachos desorientados, reclutados del lumpen del que se nutren las fortunas del demonio de Tasmania, de Hugo Jarquín, de Pancho mugres y su hijo, dueños de esa organización que llaman “14 de junio”. Para estos ya se preparan los rudos de la CTM.
Por si esto no fuera suficiente para contener esas masas que se nutren de las migajas que les dan los dueños de las más de 800 organizaciones “sociales” que, en cambio, reciben cifras multimillonarias del gobierno, el PRI y su estructura de obreros y campesinos, como la CTM, también preparan a sus contingentes. Desde ayer empezaron a movilizarse para blindar los alrededores del palacio legislativo donde Alejandro Murat, rendirá protesta.
Con estas informaciones deducimos que el amago del cartel 22 de bloquear e incomunicar por vía terrestre a toda la entidad oaxaqueña, se reduce a eso, mera amenaza.
En mi entrega del pasado 2 de agosto, puse en el ESCAPARATE algunos pormenores sobre los arreglos para una toma de posesión de Alejandro Murat, sin sobresaltos.
Las expectativas en torno al nuevo jefe del Ejecutivo estatal, se basan en la paz mediante el diálogo. Negociaciones, pues. No hay que olvidar el anuncio que hizo del “milagro oaxaqueño” con la mano amiga extendida. El mensaje fue claro: lo hizo teniendo a la diestra a su “padrino” -así lo acepta públicamente el ahijado- líder nacional de La CTM, Carlos Aceves del Olmo ¿Esto que signo puede tener?
Que el próximo gobernante tiene claro cuales recursos tiene en sus manos para la preservación de la paz social con grupos afines.
Esto no es nuevo en la praxis política. Al inicio del gobierno “del cambio”, Gabino le permitió a su entonces alter ego, Benjamín Robles, el chilango de triste memoria, crear sindicatos golpeadores como CNP, Libertad o convertir a otros a su causa política como la CROC de Mayra Luis. Su fin era hacer contrapeso a sindicatos corporativos del PRI.
No puede ser casual que, al calor de las recientes elecciones, el líder nacional de CNP haya anunciado la anulación de sus siglas en Oaxaca.
En el mismo sindicalismo utilitario está la misma sección 22 del SNTE, que en la negación de su sello de movimiento “democrático”, ya sabemos que vende su lealtad al mejor postor.
LA CONTENCIÓN
Con mucha anticipación, Murat Hinojosa y su equipo de asesores, empezaron a negociar para que el uno de diciembre próximo la calamidad cíclica del cartel 22 haya menguado.
Conocedor de los tentáculos que mueven los resortes el poder, las negociaciones se dan en las altas esferas donde los políticos de casta de este país, los que mueven a los grupos, discuten sobre ejercicio del poder al margen de la ética y negocian con apego al maquiavelismo que pone en el centro del ejercicio del gobierno la ambición, crueldad, cinismo, engaño y mentira como algo natural.