Belén Rodríguez
Cd. de México (31 diciembre 2016).-
Después de un año de sorpresivos eventos internacionales y preocupaciones ante un menor crecimiento económico mundial, el peso mexicano registró su peor desempeño anual desde 2008.
El tipo de cambio menudeo terminó el año en ventanillas de Citibanamex en 21 pesos a la venta, sólo cinco centavos por abajo de su máximo histórico alcanzado por primera vez el 11 de noviembre, dos sesiones después de conocer el resultado de las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El nivel alcanzado al cierre de la última sesión del año equivale a un incremento de 19.79 por ciento para el tipo de cambio, o 3.47 pesos por dólar, lo que se traduce en una depreciación de 16.52 por ciento para el peso.
En el caso del tipo de cambio para las operaciones interbancarias, éste se ubicó en 20.64 pesos, lo que representa un incremento anual de 3.428 pesos por dólar, 19.92 por ciento más que el nivel registrado al cierre de 2015.
De acuerdo con Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, el mercado cambiario estuvo determinado por la especulación en torno de las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal, los precios del petróleo y la aversión al riesgo vivida durante el año.
La analista destaca tres factores clave para la depreciación del peso: el incremento en la inflación, después su mínimo histórico en 2015 al ubicarse en 2.13 por ciento, un estimado de menor crecimiento económico en México y el riesgo de recortes a la calificación crediticia del País.
“Lo anterior ha sumado para que el común denominador del 2017 sea la incertidumbre. De manera local existen varios riesgos que hacen muy probable un periodo de bajo crecimiento económico en México, una mayor inflación a la observada en los últimos dos años y posibles cambios en el escenario político con elecciones estatales en 2017 y federales en 2018”, destacó Siller en su reporte del mercado cambiario para el cierre de 2016.
Durante el año, Banco de México, en un intento de fortalecer la moneda ante el difícil entorno económico, elevó su tasa de referencia en cinco ocasiones, por 50 puntos base cada una, para dejarla en 5.75 por ciento el 15 de diciembre.
En la minuta de su última reunión, el banco central destacó las presiones del tipo de cambio, así como el anunciado incremento en los precios de las gasolinas como consecuencia de la liberación, como uno de los principales riesgos para el incremento de la inflación durante 2017.
La fuerte volatilidad fue evidente en el año y en el mercado Forex el tipo de cambio tocó un mínimo de 17.05 pesos el 29 de abril y un máximo de 21.3897 el 11 de noviembre, una diferencia de 4.3397 pesos entre el máximo y el mínimo.
Al cierre de las operaciones en México, el tipo de cambio Forex de ubicó en 20.7272 pesos, con lo que registra una variación anual de 20.45 por ciento, lo que equivale a una pérdida de valor 11.90 por ciento para el peso frente al dólar.
Con la depreciación de este año, la moneda nacional acumula cuatro años consecutivos con pérdidas. En lo que va del siglo, el peso ha logrado cierres anuales positivos sólo en seis ocasiones.
Para 2017, se espera que el peso enfrente diversos obstáculos encabezados por los cambios en los tratados comerciales de México con Estados Unidos como resultado de la política proteccionista anunciada por Presidente electo de ese país.
“El próximo Presidente de Estados Unidos ha mostrado escasa sensibilidad política antes de asumir su cargo y podrían erosionarse las relaciones de su país con sus principales socios comerciales, en particular China y México.
“El 2017 figura para ser un año con cotizaciones del tipo de cambio por arriba de 20 pesos por dólar y con importantes riesgos al alza”, concluyó Gabriela Siller.