No es tiempo de regateos ni chantajes políticos. Es tiempo de actuar con madurez y con visión a futuro para crecer.

Es tiempo de cerrar filas por el país. La decisión de construir un muro y perseguir a los migrantes obliga a que la sociedad esté preparada ante la posible llegada de jóvenes que llevan toda su vida en Estados Unidos, y de trabajadores que laboraron honestamente durante décadas. No es tiempo de regateos ni chantajes políticos. Es tiempo de actuar con madurez y con visión a futuro para crecer. Es tiempo de cerrar filas, sociedad y autoridades.

De cerca a Los Pinos

Una pregunta: ¿Quiénes son los dos empresarios mexiquenses cercanos a Los Pinos que además se presentan como socios de León Manuel Bartlett Álvarez -no hay muchos con ese apellido en venta de sofisticados y muy muy caros equipos médicos? Le damos una pista, por lo regular siempre presumen logros con ventas exitosas al gobierno del Estado de México. No cabe duda que es bien cierto eso de que nadie sabe para quien trabaja.

El juego de la Iglesia

La Iglesia católica vuelve a la carga, ahora para tratar de frenar la Constitución Política de la CDMX por considerar que no defiende la vida ni toma en cuenta a los ciudadanos. Con la ayuda de universidades cercanas a la Iglesia, la Arquidiócesis ya trabaja en la recolección de firmas antes del 30 de enero para pedir un plebiscito que frene la nueva Constitución.

Es curioso que desde la Arquidiócesis se promueva que quien está al frente del esfuerzo del plebiscito es José Luis Luege Tamargo, que dirige la organización Ciudad Posible.

Aunque el panista ha pedido públicamente el plebiscito porque el proyecto de Carta Magna salió de las cúpulas de poder, desde la Arquidiócesis se dice que Luege está en contra porque la Constitución ha sido construida con la “ideología de género”, o sea, reconociendo los derechos de la diversidad sexual. ¿Por qué será que ese argumento se lo tiene tan calladito? ¿A poco teme ser señalado como ultraconservador?