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Cuando se daba por un hecho la aprobación de la Ley de Seguridad Interior para las Fuerzas Armadas, en el Congreso tocaron la retirada.
Todo indica que el apantallante operativo de las fuerzas especiales de la Marina en Tepic, en el que se “abatió” al capo llamado “H2”, provocó que los diputados pensaran nuevamente sobre la conveniencia de que militares y marinos encabecen la lucha contra el narcotráfico, dada la famosa “letalidad” que han desplegado.
A eso se suma que en los últimos días diversas organizaciones ciudadanas, académicos y defensores de derechos humanos exigieron ampliar el debate, antes de que se aprobara la polémica legislación. De ahí que los diputados federales decidieron bajar el tema de la agenda legislativa, y dejar su aprobación para mejores tiempos.
Les da miedo saber que las Fuerzas Armadas cuenta con una tasa de letalidad sin precedentes, debido a su “eficiencia” para realizar “ejecuciones sumarias” y alcanzar una alarmante tendencia de registrar un mayor número de muertos por cada persona que hieren en los combates, según lo publicado por el influyente diario estadounidense “The New York Times”.
De acuerdo con el reportaje firmado por Azam Ahmed y Eric Schmitt, las Fuerzas Amadas de México matan a más “enemigos” que el promedio global, ya que basados en cifras del propio gobierno mexicano, en un combate el número de muertos supera al de heridos en una media de ocho por cada uno si actúa el Ejército Mexicano, en tanto que las fuerzas de élite de la Marina logran una cifra superior de 30 muertos por cada persona que hieren.
En ese sentido, el diario neoyorquino señala que los de las fuerzas mexicanas “son asesinos eficientes que apilan cuerpos a tasas”, y destaca que mientras las autoridades mexicanas dicen que los soldados y marinos simplemente están mejor entrenados y son más hábiles que los cárteles que combaten, los expertos que estudian el tema señalan que la tasa de abatimiento en México es prácticamente inaudita.
El mismo reportaje detalla que las estadísticas oficiales, que el gobierno dejó de reportar desde hace dos años, revelan que el Ejército Mexicano y la Marina Armada de México asumió su papel en la guerra contra el crimen organizado sin vigilancia y ponen al descubierto algo “más siniestro” de lo que las autoridades del país reportan. También cita casos como Tlatlaya y Ayotzinapa, donde ha sido cuestionado el papel de las fuerzas militares.
Sin embargo, el diario apunta que las fuerzas armadas siguen estando en gran parte intactos y protegidos por el propio gobierno que no ha tomado medidas enérgicas contra los abusos de sus Fuerzas Armadas.
El alto índice de letalidad en los operativos contra supuestos delincuentes se debe principalmente a que los elementos castrenses no están capacitados para detener criminales y prevenir delitos, porque no son policías y sí para exterminar a sus enemigos, y en esa medida no respetan los protocolos de uso de la fuerza.
Así que por lo pronto, la discusión la Ley de Seguridad Interior seguirá a la espera de ser analizada y aprobada.